Me voy de finde a Barcelona para visitar a el Italiano y ensuciarme un poco los pulmones que con tanta vida sana casi lo necesito y todo. De paso que estoy aquí, le propongo al muchacho subirnos algún monte cercano y para ello recuerdo el Parque Natural de Sant Llorenç del Munt y de l’Obac que a cuatro pasos de la ciudad constituye un perfecto escape a los ruidos y rutinas varios y varias. Su cima culminante es la Mola con 1103m. de altitud así que elegimos acercarnos a ella pasando antes por el Montcau de 1056m. partiendo desde el Coll d’Estenalles.
Para llegar al Coll d’Estenalles, salimos de Barcelona
dirección Terrassa en busca de la población de Matadepera donde continuaremos
por la carretera BV1221 hasta encontrarnos con un parking y un par de
edificaciones del parque.
Al bajar del coche nos recibe un viento veloz y congelador
que me hace dudar por un momento pero enseguida recuerdo que es una excursión
corta y sencilla así que venga, empezamos a andar. Esto no tiene pérdida: nos acercamos a la
carretera y la cruzamos para encontrarnos al otro lado una pista asfaltada
atravesada por una cadena que corta el paso al tráfico rodado pero lo abre a
los andarines con una buena cantidad de inequívocas indicaciones.
Al poco nos encontramos un desvío hacia nuestra izquierda
que nos indica el camino al Montcau, lo seguimos por una amplísima senda que
nos irá transportando hacia la base de esta pequeña mole pétrea para girar un
poco hacia nuestra derecha mientras vamos ganando metros sobre un duro terreno
de conglomerado que se inclina de lo lindo cuando cambiamos de dirección para
llegar a la cima desde donde contemplamos Montserrat, adivinamos el Pirineo más
cerca de lo que parece y observamos lo que nos queda hasta La Mola.
Desandamos por esa última rampa para enseguida continuar
recto y plantarnos en el Coll d’Eres.
Desde aquí sólo nos queda transitar a través del bosque por la amplia
senda que en un muy suave ascenso nos conduce al Collet dels Tres Termes desde
cuyas inmediaciones contemplamos ya más cerca nuestro destino. Acometemos ahora un pronunciado descenso que
nos llevará a un pequeño cañón que nos abre las vistas al mar allá cercano y
brillante.
Un corto flanqueo por terreno firme de conglomerado nos
lleva hasta un pequeño barranquito que remontaremos para salir a una inclinada
ladera final que nos llevará a la cumbre coronada por el Monasterio de Sant
Llorençs de Munt donde coincidimos con cientos de andarines que también han
elegido este destino hoy a pesar del incomodísimo viento que sopla.
Buscamos un trasaire entre la multitud para plantar las
posaderas un rato mientras comemos y bebemos contemplando un bonito paisaje de
mar y ciudad que nos hace olvidar las voces y ruidos variados del gentío que
nos rodea.
Para regresar al coche sólo tenemos que desandar nuestros
pasos ahora que el viento ha cambiado y sopla menos fuerte y más cálido. Contemplamos el Montcau desde otra
perspectiva que nos deja admirar la belleza de los pequeños parajes. Bajamos, subimos y volvemos a bajar conforme
nos acercamos a éste último para dejarle esta vez a nuestra derecha y recorrer
su falda casi llaneando hasta el coche.
No me llevé el GPS, así que el track se lo busquen usteden
en San Wikiloc que hay un montón.
Fecha real: 22/02/2015
Desnivel acumulado: no llega a 400m.
Distancia recorrida: unos 17km.
Tiempo invertido: 4h.
2 comentarios:
Esas montañas tienen su parecido con la zona de Guara. Bonitas vistas de la ciudad y el mar, un saludo
Sí Eduardo, sobre todo el Montcau es como estar en Vadiello.
Saludos!
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