¡Vaya primavera asquerosa! Entre semana días cálidos,
limpios y encantadores pero el fin de semana, cuando una tiene tiempo: días
frescos, ventosos y tormentosos… pues ¿sabes qué? Que yo no me quedo en casa,
ni J.M.N. ni Kankel con quienes he quedado en Biescas para ponernos en marcha
hacia Francia pues llueva truene o relampaguee tenemos la firme intención de
cruzar la frontera y alargarnos casi hasta Olorón para subir un pequeño pico
que dice JM que va a ser muy chulo. Por
suerte, entra en razón al ver el marronazo que ya está descargando en la
frontera, así que ¡hala! Nos damos la vuelta y con muy buen criterio decidimos
quedarnos cerca de casa, nos vamos a ver el Arco de Piedra Natural de
Piedrafita de cerca, que el año pasado le pasamos al lado y nos quedamos con
las ganas.
Durante esta primavera rara, las orquídeas vienen con retraso, aquí una dactylorhiza aún por terminar de desarrollar |
La cosa es muy fácil.
Dejamos el coche junto a una nave ganadera que hay antes del parking de
La Cuniacha y empezamos a caminar por la pista que se dirige claramente a las
paredes de la Punta Cochaldo que ya ascendimos el año pasado y nos saluda con
cariño cuando las nubes la dejan ver.
Tras algo más de tres kilómetros caminados, en una curva
cerrada a la izquierda, nos desviamos sobre nuestra derecha para incorporarnos
a una senda que irá ganando altura por la cuenca seca del Barranco de Furcos
hasta llegar a las inmediaciones de Plana Terrosa donde paramos un ratico a
almorzar que ya nos lo hemos ganado.
Punta Cochaldo, se deja ver entre las copas de los árboles, sólo cuando el desfile de nubes le deja un hueco |
Continuamos por trazas de senda buscando marcas de pintura
blanca-azul que, según un cartel que hemos visto más abajo, nos llevarán al Arco que efectivamente, tras
atravesar una pedrera y subir un buen repecho por bosque, veremos aparecer por
nuestra izquierda situado en mitad de la pendiente. Nos encaramamos y pasamos, literalmente, por
el arco dejando buenas pruebas gráficas de ello y acto seguido regresamos a la
senda para continuar dirección al Ibón de Piedrafita por senda clara y balizada
a media ladera dejando a nuestra derecha lo que claramente debió ser un ibón
ahora colmatado, donde las ovejas pastorean en una bucólica estampa. A todo esto nos empieza a llover pero para
algo llevamos los “goreteses”.
Una hormiguita comparada con la inmensidad del Valle de Tena |
Tras rodear una dolina que queda a nuestra izquierda, se
abre la vista al ibón hacia el que bajamos para rodearlo y disfrutar de la
soledad que muy raramente se produce en este lugar tan conocido y
accesible. Tras otra ronda de fotos bajo
la lluvia, decidimos bajar por la senda paralela al barranco de desagüe del
Ibón para acercarnos al Refugio de las Planas a comer. Desde aquí ya sólo nos queda buscar la senda
que sorteará las curvas de la pista a la que nos reincorporaremos girando a
nuestra derecha para dirigirnos al punto de partida y culminar este encantador
paseo.
No hay suficiente ibón para reflejar toda Telera, magnífica ella |
Desnivel: 590m
Distancia: 11,70km
Tiempo invertido: 5h30m
3 comentarios:
Muy maja excursión. Combinar el ibón de Piedrafita con el Arco le da un plus.
Y qué poco ha durado la primavera, ya están aquí los calores!
Saludos!!
Hola Pirene.
Una clásica bien maja os salió, para disfrutar¡¡
Salud¡¡
Fer
Pues no se que es mejor, si que llueva un poco, o haga un calor de narices, yo casi me quedo con lo primero.
Una ruta clásica del valle de Tena, solo os falto el bosque del Betato.
Un saludo
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