La primera vez que visité Donosti guiada por Bonito del
Norte, me fijé en un pequeño macizo pedregoso y denteado que me provocó. Han pasado años desde entonces pero nunca
hemos tenido el tiempo y/o las ganas de acercarnos a este lugar.
Las Peñas de Aia se caracterizan por ser el único macizo
granítico existente en todo el País Vasco, se encuentran protegidas por la
figura de Parque Natural y son visibles casi desde cualquier parte de San
Sebastián, hecho el cual las convierte en lugar de visita obligada entre
lugareños y foráneos como servidora que hoy se lanza a la conquista de estas
primeras estribaciones pirenáicas junto a mi incansable Bonito y su amiguito Ra
que hoy nos hace de guía.
Como me llevan, no tengo ni idea de dónde hemos aparcado…
digamos que en las inmediaciones de las Minas de Arditurri en un parking que
está bastante vacío. Esta no es la ruta
normal a las Peñas de Aia que son tres: Irumugarrieta, Txurrumurru y
Erroilbide, sino una variante más larga que me servirá para una toma de
contacto completa con este magnífico entorno.
Empezamos a caminar ya con la vista de las Peñas delante
nuestro siguiendo una pista que enseguida se adentra en las instalaciones de
las Minas de Arditurri cuya historia no os cuento que para eso tenéis su web AQUÍ. Nuestro primer objetivo es la Borda de Unai,
a la que llegaremos transitando primero un ancho camino paralelo al Barranco de
Arditurri a nuestra izquierda y sorteando un bosque mixto caducifolio
predominado por altos robles de los que alguno aún conserva algo de hoja para
mantener un poco de color del otoño que está presto a terminar. Estamos sobre
la PR-GI 1009 y queremos alcanzar la GR121.
Cuando la vegetación se convierte en hayedo, dejaremos las
delicias de esta cómoda senda para atajar la ladera por una senda mucho más
empinada que nos hará ganar toda la altura necesaria para cruzarnos con la
GR121 y hacia nuestra izquierda alcanzar el alto de Elurretxe, lugar desde el que sale la ruta normal que
ahora enlazaremos para unirnos a las hordas de humanos que hoy Domingo salpican
estos caminos y me ponen nerviosa en un entorno que no es el mío.
Giramos a nuestra derecha todavía por el hayedo que pronto
cederá paso a las verdes y empinadísimas laderas que nos auparán a una primera
cota: el Mugani (758m) donde se abren las vistas al abrupto entorno de las
Peñas que nos llaman. A partir de aquí,
la progresión se complica y nos encontramos en un ambiente bastante más hostil
de lo que me habían hecho creer las reseñas.
Avanzamos por sendero muy indicado en un sube y baja por
terreno muy empinado hasta encontrarnos con el contrafuerte de la primera
peña. Primero bajaremos a un pequeño
collado para afrontar una travesía que ya nos pide cuidar el paso y colocar
alguna mano para enseguida superar una canaleta en la que sí deberemos utilizar
las manos para mantener el equilibrio.
Finalmente llegamos a la cima del Irumugarrieta que nos recibe muy
ventoso pero agreste y bello como sus hermanos que nos provocan aquí al
lado. Un par de fotos y ponemos rumbo a
la segunda peña que nos espera llena de gente.
Vamos caminando atentos y con cuidado mientras un grupo de
chavales se nos acerca… unos nos adelantan y otros nos siguen por la cresta
poco complicada pero ambientada hasta que nos topamos con un destrepe. Mientras guardo los bastones me vuelven a
adelantar dos muchachos y comienzan a ayudar a sus compañeras. Cuando llevamos unos diez minutos esperando,
decidimos darnos la vuelta. Demasiada
gente, demasiado ambiente y queremos llegar abajo a comer así que media vuelta
y a desandar nuestros pasos por donde hemos venido.
Como colofón a una mañana magnífica de montaña nos hacen
sitio en un restaurante que también está lleno a rebosar. Me calzo unos pimientos rellenos bien regados
con sidra como Dios manda mientras pienso en la próxima visita que haré a este
lugar para culminar la indomable gesta de las Peñas de Aia.
AQUÍ el track
Fecha real: 06/12/2015
Desnivel acumulado: 809m.
Distancia recorrida: 10km.
Tiempo invertido: 5h.
5 comentarios:
Así que trepadas y todo...chica, chica, que buena pinta saca eso.
Enhorabuena por la triunfada!! Y a ver cuándo nos vemos, que se ha pasado noviembre sin la citada quedada bloggera...
Un abrazo maja!! y otro pa Bonito.
Hola Pirene.
Tienen muy buena pinta estas Peñas de Aia, al ser muy conocidas en la zona, es normal que haya mucha afluencia de gente, eso pasa en todos los sitios.
Una pena que quede tan lejos, porque las cimas, el entorno, y esos pasos con patio, las hacen muy apetecibles.
Un saludo
La verdad que sí que tienen buen ambientillo, os las recomiendo... con ir a pasar un fin de semana por las inmediaciones os las hacéis.
Salud!
Picos "pequeños" pero potentes. Con la afición montañera que tienen por allí no me extraña que sean lugares concurridos.
Y esos pimientos rellenos, uf, buen broche, qué bien se come por allí. Solo imaginarlos me han dado hambre a estas horas.
Salud y orujo!
Hola Pirene.
Vaya lugar bonito las Peñas de Aia, eso de estar en la cima y ver el mar es una gozada. Y como dices, ya combinada con turismo gastronómico, un finde *****.
Que suerte tienen los que viven por allí¡¡¡
Salud¡¡
Fer.
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